En los últimos tiempos escuchamos en el entorno online el término inbound marketing. Pero, ¿a qué se refiere realmente? No es otra cosa que un término complejo que engloba distintas técnicas que hasta ahora se trabajaban de manera independiente. Su principal ventaja es que relaciona todas las herramientas y las combina para maxificar sus objetivos.
Para conseguirlo se necesita:
Atraer tráfico a la web a través del marketing de contenidos: Se emplean una serie de estrategias a través del uso de distintas palabras claves para conseguir llegar a un público objetivo concreto. Para ello se suelen realizar blogs corporativos.
SEO: Técnica por la cual se consigue una mayor visibilidad en buscadores. Para conseguirlo, se emplean técnicas específicas marcadas por el algoritmo de Google.
Social Media marketing: A través del uso de las redes sociales se puede llegar al consumidor final y crear una comunicación bidireccional en la que la empresa puede aprender con escuchar al usuario.
Landing Pages: Se usan como "páginas de aterrizaje" cuando se está haciendo una campaña concreta en la que se buscan registros de los usuarios. Con ello, las empresas consiguen tener información del usuario (email y teléfono) que pasarán a formar parte de su base de datos.
Con el empleo de todas estas técnicas, se consigue aumentar y posicionar la imagen de la empresa.